Ficha

 

ADMINISTRACIÓN
Número de Inventario 219
Letra
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IDENTIFICACIÓN
Nombre atribuído Muestrario de huipil
Autor Desconocido
País Guatemala
Localidad/Origen Chichicastenango
Tipología Textil
Fecha de creación c.1990
Descripción física De color café con flores en el cuello
Marcas o Inscripciones
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No contiene
DESCRIPCIÓN MATERIAL
Técnica Tejido a telar
Materialidad Hilo y teñido natural
Función Utilitaria
Encargada de colecciones
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Camila Caris
ADQUISCIÓN
Adquisición Compra
Procedencia Mercado de Antigua, Guatemala
Fecha 2008
Notas Viaje realizado por Esperanza Hidalgo a Guatemala el año 2008
Fotografía Estudio Frame

 

 

EL HUIPIL

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Los huipiles, son blusas utilizadas desde la época prehispánica por las mujeres de Mesoamérica, como parte de su indumentaria tradicional. La palabra huipil se deriva del vocablo “huipilli” que en náhuatl significa “mi tapado”. Estas prendas, son tejidas tradicionalmente en telar de cintura y decoradas con diversas técnicas textiles, como el brocado de trama suplementaria, bordado a mano, bordado a máquina y en algunos casos, con aplicaciones de bisutería. Los motivos representados, están relacionados a la cosmovisión, la flora y la fauna local, las leyendas o los mitos; por lo que son considerados testimonios materiales de la memoria histórica de la región.

En la actualidad, en algunas localidades de Guatemala que poseen clima tropical, se ha reemplazado la producción del huipil en telar por telas acrílicas bordadas, que resultan ser más cómodas para el calor. Aunque en otros casos, se ha comenzado a popularizar el uso de telas acrílicas estampadas con los motivos tradicionales, que resultan ser mucho más económicas de adquirir que un huipil de fabricación manual, cuestión reciente que puede poner en riesgo la tradición productiva de este objeto en el país.

Sus orígenes

En un inicio, los huipiles tenían un carácter estrictamente ceremonial, por lo que se puede ver en algunas representaciones halladas en cerámicas de la época prehispánica. Donde se observan mujeres de alta jerarquía, quienes aparecen cubiertas con diversas “túnicas” sueltas al cuerpo, cuyo largo variaba ya que podían llegar hasta la rodilla, los tobillos o a la cintura, aunque siempre manteniendo su diseño rectilíneo.

 

Reseña realizada por Sonya Luna Ruiz

Revisión de texto a cargo de Camila Caris Seguel

EL HUIPIL EN GUATEMALA

El tejido tradicional de las comunidades mayas, que abarcan el sureste de México y gran parte de Centroamérica, se remonta a la época prehispánica, cuando sus antiguas civilizaciones crearon tejidos de gran belleza que fueron reconocidos en toda el área mesoamericana. Por siglos, generaciones de tejedoras han tomado el telar de cintura como herramienta para crear piezas que, entre sus figuras y diseños, transmiten los conocimientos, mitos e historias de sus pueblos.

En Guatemala, la indumentaria varía de comunidad en comunidad, ya sea en sus formas, colores, diseños, técnicas o uso. Hoy en día, las antiguas técnicas del arte textil, se siguen conservando entre casi todas las etnias mayas contemporáneas, destacando el uso del telar de cintura, un artefacto creado con palos de madera, que se amarra a la cintura de la tejedora. A pesar de su sencillez, éste permite elaborar telas ricas en diseños y de gran complejidad, como el huipil, una de las piezas más representativas del arte textil en Mesoamérica.

El huipil, es una prenda rectangular utilizada por las mujeres desde la época prehispánica, que es creada a partir de un lienzo, o bien, de la unión de 2 o 3 lienzos tejidos en telar de cintura. Algunos son creados para usar en la vida cotidiana, por lo que se ligan al sentido funcional y utilitario de la indumentaria. Mientras que otros, son creados para ser portados durante ceremonias y rituales religiosos, o para vestir a las santas en las iglesias, por lo que son denominados tradicionales o ceremoniales.

Este huipil proviene de la zona de Santo Tomás de Chichicastenango, ubicada en las Tierras Altas de Guatemala, en el departamento de El Quiché, región con una población mayoritariamente indígena de la etnia quiché.

La comunidad de Chichicastenango, también es conocida por tener uno de los mercados más representativos a nivel nacional e internacional del textil maya, el cual se puede visitar alrededor de la iglesia de Santo Tomás, los martes y domingos, y en donde se pueden apreciar y adquirir huipiles antiguos y contemporáneos de la región.

En esta pieza se puede observar la continuidad del tejido antiguo, así como la incorporación de técnicas occidentales. Por un lado, se encuentran diseños populares de la región como el “zigzag” y los motivos de aves; figuras creadas con hilos de tramas suplementarias, una técnica utilizada desde hace siglos, que permite crear figuras al mismo tiempo que se teje la tela del huipil.

Asimismo, el cuello es decorado con flores bordadas, técnica que remite a la tradición española, la cual se asimiló como parte de la tradición textil, dando lugar a la creación de los tejidos contemporáneos.

En cuanto a los materiales, destacan el uso de tintes naturales y de algodón hilado a mano. Lo cual, muestra la continuidad y la preservación de conocimientos antiguos. Sin embargo, actualmente es difícil encontrar este tipo de piezas, debido, entre diversos factores, al largo tiempo que lleva su elaboración, por lo que las tejedoras optan por las fibras sintéticas para crear sus piezas.

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Reseña realizada por Brenda Ojinaga Zapata

Revisión de contenido a cargo de Camila Caris

GUATEMALA

Breve contexto histórico

Guatemala es un país soberano ubicado en América Central. Limita con los países de México, Belice, El Salvador y Honduras. Posee una gran variedad climática debido a su geografía, que abarca zonas frías propias de la montaña, con volcanes y lagos; además de un clima tropical en la zona del caribe al oriente y sur del país.

Anterior a la invasión española, en lo que ahora es Guatemala se estableció una de las civilizaciones más importantes para la historia americana: la sociedad Maya, quienes se destacaron por el desarrollo de su propio sistema de escritura, agricultura, calendario, numerología, arquitectura y producción artística. La cual se vio truncada a partir de la llegada del español Pedro de Alvarado en el año 1523, iniciando con ello el genocidio de la comunidad Maya, junto a la introducción de las costumbres europeas, entre ellas la religión católica. Hasta el año 1821 cuando Guatemala logra su independencia de España y se integra al Primer Imperio Mexicano.

Para 1824 Guatemala pasa a formar parte de la República Federal de Centroamérica junto a los países de El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica, creándose posteriormente un sexto estado, llamado Los Altos, ubicado en el occidente de Guatemala. A partir de esto, comienza una etapa de disputas y guerras entre diversos grupos de la oligarquía por el control de la nueva República. Hasta que en 1838 los países de la Federación comienzan a reclamar su independencia y el Estado de los Altos es tomado por Guatemala.

Dentro de la historia política, la guerra y el genocidio indígena ha marcado la memoria colectiva del país, desde la colonia hasta la actualidad. Uno de los hechos más sangrientos ocurridos en la historia moderna fue el Conflicto Armado Interno desde 1960 hasta finalizar en 1996, con la firma de los Acuerdos de Paz. Sin embargo, a partir de este conflicto armado, salieron a la luz una serie de denuncias por asesinato y violencia sexual hacia líderes comunitarios y mujeres, del pueblo Ixil y de las abuelas Q´eqchi´ de la aldea Sepur Zarco. Casos emblemáticos, ya que fueron estas comunidades quienes llevaron a juicio a los militares perpetuadores de las violencias. Sin embargo, todavía hay cientos de casos que han quedado en la impunidad y hasta la actualidad no se ha conseguido justicia, debido a que el propio Estado de Guatemala ha desarrollado una serie de leyes que han permitido la impunidad, para quienes cometieron delitos de lesa humanidad en las comunidades indígenas del país.

Producción artística

A partir de la variedad de comunidades indígenas que integran Guatemala, la producción artística es muy variada, cargada de cosmovisión e historia. Dentro de los pueblos mayas, se destaca en general la producción de textiles a partir del tejido en telar de cintura, trabajo realizado principalmente por mujeres, quienes son las encargadas de transmitir los saberes ancestrales de la comunidad. Elaborando huipiles, fajas, cortes, cintas para el pelo, mantas, camisas, pantalones que utilizan cotidianamente, pero también comercializan en los mercados locales para generar economía familiar. Además, en el Departamento de Totonicapán (capital del ex Estado de Los Altos) se suelen producir objetos utilitarios hechos en cerámica y elaboración de juguetes, oficio desarrollado principalmente por hombres. También, en el Departamento de Sololá hay mucha producción artística, principalmente vinculada al tejido con chaquiras, textiles y pinturas costumbristas, las cuales han logrado comercializarse a partir del turismo en la localidad.

Por otro lado, la cultura Garífuna también se destaca por su producción artística, la cual está más vinculada a la música y las danzas. Sin embargo, todavía podemos encontrar algunos artistas que trabajan cestería, tallados en madera (para la elaboración de tambores), objetos utilitarios y pintura. Aunque actualmente estas prácticas están en decadencia principalmente debido a la migración.

Reseña realizada por Camila Caris Seguel

Comunidades

Como descendientes directos de los Mayas, en Guatemala actualmente habitan 22 comunidades indígenas, con su propio idioma, pero con tradiciones culturales vinculadas al uso de la indumentaria tradicional, las danzas, música en marimba y la elaboración de tortillas, tamales y atol hechos de maíz. Pueblos que a pesar de la persecución colonialista han logrado resistir y sobrevivir, siendo actualmente Guatemala, el país con mayor porcentaje de indígenas de toda Centroamérica. Dentro de las comunidades mayas están los Achí, Akateko, Awakateko, Chuj, Jakalteco, Kaqchikel, Tekiteko, Poqomchi, Poqomam, Mam, Qeqchi, Uspanteko, Atza, Kiché, Chorti, Tzutujil, Sakapulteco, Chalchiteco, Mopán, Qanjobal, Sipakapense e Ixil.

Además, en el país también habitan otras comunidades, como los Xincas (ubicados principalmente en la costa sur del país) y la Garífuna. Esta última comunidad, es de origen afroindígena caribeño, establecidos en el oriente del país durante el S.XIX, a partir de su exilio forzado de la Isla de San Vicente y las Granadinas. Sin embargo, todavía en la actualidad el pueblo Garífuna está tremendamente invisibilizado dentro de la política guatemalteca. Debido a que en el municipio de Livingston (donde habitan la mayoría) las escuelas, el sistema de salud, el acceso al agua potable y a la energía eléctrica, son servicios bastante precarios ya que se ha priorizado el desarrollo del turismo en la localidad, antes que garantizar los derechos básicos de la comunidad. Aunque lamentablemente, esta realidad no es muy distante al cotidiano que viven en general los pueblos indígenas de Guatemala. Además, cabe destacar la existencia de la comunidad hindú, quienes también habitan en Livingston, pero como no se les ha considerado dentro de los pueblos que integran el país, han perdido muy rápidamente sus costumbres, idioma y tradiciones.

jesus
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